Por: WonderWoMOM
Hoy quiero hablar de los “gadgets”
que han hecho mi vida de WonderWoMOM más fácil. Son productos novedosos que uso
con frecuencia y cada vez que mi mamá o mis tías los ven me dicen “eso no
existía en nuestra época, definitivamente a ustedes si les toco muy fácil con
todo inventado”. Lo cierto es que hoy en día ya hay tanto en el mercado que el riesgo
de comprar cosas innecesarias es muy grande… más si uno es mamá novata. Todo se ve divino,
todo parece útil y práctico, ¿pero qué se necesita en realidad?
Hoy les comparto mi top 3 de productos
que se convirtieron en “life savers” para mí y que han pasado las pruebas en la
práctica con mi hija Julieta, (hoy de cuatro meses).
Cuando nació Julieta ya mi cuñada me había
contado la trágica historia de como se le había ido la mano cortándole las uñas
a mi sobrina cuando tenía 3 meses, y como, aunque no fue grave, las dos
lloraban al tiempo mientras volaban goticas de sangre. La tarea de cortarle las
uñas a un bebé es definitivamente más difícil que la cambiada de pañal.
Recuerdo que en algún momento llegué a pensar “¿y si no se las corto y le pongo
mitones fijos por lo menos hasta los 6 meses para que no se aruñe?” pero
obviamente era una de esas estupideces que a uno se le ocurre cuando no tiene
ni idea de cómo cuidar un bebé.
Al principio el miedo de cortarle más que la
uña a mi Julieta no me dejaba cortarle nada. Siempre atrasaba esa tarea: “ahora
no porque esta oscuro el día y no veo bien”, “mejor mañana porque ya se durmió y
no quiero despertarla”, hasta que aparecía el aruñetazo en su cara anunciando que
hace rato era hora de cortarle las uñas y obviamente el sentimiento de culpa se
apoderaba de mi.
Todo cambió cuando conseguí una lima con motorcito llamada Zo-Li Buzz, que la verdad me ha funcionado muy bien. Aunque me demoro un poquito más que con el cortauñas o con una tijerita, ¡por lo menos no corro el riesgo de cortarle el dedo!
Todo cambió cuando conseguí una lima con motorcito llamada Zo-Li Buzz, que la verdad me ha funcionado muy bien. Aunque me demoro un poquito más que con el cortauñas o con una tijerita, ¡por lo menos no corro el riesgo de cortarle el dedo!
Con el tiempo descubrí que el mejor momento para
limarle las uñas es cuando la estoy amantando. ¡Ella está tan concentrada en lo
suyo y relajada que no se da ni cuenta! Así que yo saco la limita y usando mis
dos manos le hago un manicure express. Eso si, tengo que confesar que los
aruñetazos en la cara no desaparecieron del todo. De vez en cuando aparece uno,
lo bueno es que ya no me siento tan culpable…al fin y al cabo como WonderWoMOM
que soy le hago sus uñas dos veces por semana con mucho amor y dedicación.
Lo que no me
gusta: A medida
que van creciendo, las uñas se ponen más gruesitas y aunque tienen una lima
adecuada para cada edad (de 0-3 meses, de 3-6 meses, y de 6-12 meses), cada vez
se vuelve más demorado (además cada vez Julieta se mueve más). Ya superado el
trauma de los dedos mutilados en el ejercicio de cortarle las uñas, estoy
optando por usar el cortaúñas y después rematar con la lima, sobretodo para las
esquinitas que son asesinas. También me parece que la batería se le acaba muy
rápido, porque cuando gira muy lento ya no lima nada, lo bueno es que es una
sola pila AA que siempre hay en la casa.
Desde el
primer mes de nacida Julieta, me di cuenta que lo que menos le gustaba a mi
hija era la cambiada de ropa. Justo en el momento que sentía la ropa acercarse
a su cabeza o a sus bracitos, empezaba la alegadera, los brazos rígidos y el llanto
que podía incluso traducirse en gritos.
Yo pensé
que era algo característico de Julieta y por eso me decía con propiedad “a
Julieta le gusta su baño, pero lo que si no le gusta es que le pongan (o le quiten) ropa”, otra
de las estupideces que uno dice cuando no tiene ni idea de bebés, pues después
me di cuenta que TODOS los bebes son así, y es entendible… tener estripada la
cara mientras le sacan la ropa por la cabeza, o sentir que los brazos
espichados para meterlos en los mini huequitos de la ropita de bebé, no debe
ser para nada divertido.
Las
pijamas de botones para mi son eternas de cerrar y durante los primeros meses,
cuando tenía que cambiarle el pañal 3 veces en la oscuridad de la noche y medio
dormida, si que las odié. Intenté también con las de cierre, pero tampoco me
convencieron porque para cada cambio, tocaba abrirle toda la pijama de cuello a
pies, así que el pecho se le enfriaba y empezaba a estornudar. Las batolas con
resorte al final tampoco me funcionaron porque meterle la cabeza es la parte
que menos le gusta y sentía que le entraba friíto por debajo … Ahh también
ensayé con los kimonos pero son conjuntos de pantalón y camisa, entonces igual
le tenía que poner un body debajo para que cuando se le subiera la camisa no le
diera frio, osea, igual tocaba meterle la cabeza por el hueco otra vez.
¿Qué otra
opción me quedaba? Si fuera en la época de nuestras mamás la verdad es que
ninguna. Pero en la era de los inventos encontré la mejor opción un día casual
en un almacén cerca de mi casa: Las pijamas de Magnificent Baby no tienen cierre,
no tiene botones, no tiene resorte abajo, y no son pantalón y camisa…tienen
imanes. ¡En 3 segundos la pijama esta lista y cerrada! Para las noches de
varias despertadas me pareció perfecta y además puede ir a la lavadora sin
problema (que para las WonderWoMOM que vivimos USA es algo que hay que
considerar seriamente). Ahora es la pijama favorita de Julieta y de la mamá de
Julieta.
Lo que no me gusta: El cuello de la pijama es un
poquito abierto, me gustaría que fuera más cerradito para que le abrigara más.
Creo que
el canguro, o manos libres (como lo llamo yo) es un elemento que existe desde
hace ya varios años. Puede que no les haya tocado a nuestras mamás pero seguro
a nuestras primas mayores tuvieron las primeras versiones.
La
novedad es que ahora hay diferentes modelos para las diferentes necesidades y
de eso me di cuenta cuando en el centro donde tomaba mi curso prenatal había
una clase de hora y media que se llamaba “baby wearing” o como seria su
traducción literal “ponerse al bebé”. ¿Qué tanto podrían decir para que la
clase durara una hora y media? Entonces le pregunté a mi doula y ella me dio
una clase express. Existen los wraps, que son las telas largas que uno se
envuelve, como el Moby o el K-tan, los slings que son las telas de un solo
hombro como los Maya wraps y los carriers que son como un maletín y los Ergo,
Boba y Baby Bjorn son los más famosos.
Yo
inicialmente compré el sling. Pensé que era lo más practico porque el wrap se
veía muy complicado de poner. Pero la verdad no me gustó porque sentía que
Julieta no quedaba bien segura y en las mismas instrucciones decía que debía
sostenerle la nalguita con una mano…entonces ¿cuál es el punto de usar un manos
libres si las manos no quedan libres?
A los
pocos días tuve suerte que una amiga me presto su wrap para ensayarlo y me
enseñó a ponerme a Julieta. Al principio se me hacía muy difícil meterla en el
wrap y ella lloraba porque no sabia que estaba pasando, pero una vez estaba
adentro se quedaba feliz. Lo usé mucho los primeros 3 meses. Una vez durmió
casi 5 horas, ¿te imaginas la cantidad
de cosas que alcanzas hacer con tus manos libres 5 horas? Para mi ha sido una
ayuda muy grande.
Después
me pase el “carrier” que es para cuando ya son más grandecitos como de 3 meses y
ya sostienen mejor la cabeza. El más comercial es el Baby Bjorn pero el sistema
que tiene es muy incomodo para el bebé porque no queda sentado con su nalguita
sino como colgado entre las piernas. Julieta no aguantaba mucho tiempo metida
ahí así que investigamos y ensayamos el Ergo y el Boba y en mi investigación
descubrí que el Boba es más cómodo para mamás de contextura pequeña y el Ergo
para mamás de contextura grande. Por lo tanto me fui por el Ergo y soy una mamá
grande completamente feliz con él. Por ejemplo a Julieta la meto en el carrier
10 minutos antes de abordar un avión y cuando nos montamos ya está dormida. A
veces se despierta en otro país y no se da ni cuenta.
Cualquiera
que sea tu elección de canguro lo cierto es que a los bebes les encanta estar
apretaditos, en el calor humano de la mamá sintiendo su corazón latir y eso les
da mucha seguridad, y por otro lado a uno le encanta saber que tiene algo de
tiempo para arreglarse y maquillarse, leer, estar en el computador, ver TV
arreglar la cocina, salir a caminar, comer, etc.
Lo que no me gusta: es muy grande y aparatoso para
cargar a todas partes. Deberían ser como más pequeños para poder llevarlos
fácil en la pañalera.
Ideal saber que cosas realmente son útiles en el mundo de los bebés, lo de la pijama me parece genial, y bueno amo los Portabebés o "Wear my baby". Me gustaría publicar esta entrada en mi blog, y compartirla con mis lectoras. Te cito como entrada original, y así remito a quienes nos leen aquí.
ResponderEliminarGracias